El presidente del Senado: “Lo que hoy nos parece natural en política, no lo era hace cuarenta años”

“Habéis nacido en democracia. Os parece normal que cada uno tenga su pensamiento y lo pueda defender con libertad, exigir sus derechos. Que la policía esté para nuestra seguridad. Y que los gobernantes estén sometidos al imperio de la ley. Hace cuarenta años, esto no era normal”. Así de lapidario se mostró el presidente del senado, Pío García-Escudero, dirigiéndose a los colegiales del Aquinas el pasado jueves 28 de marzo. Lo hizo en una conferencia que impartió en el salón Santo Domingo de este centro ante un nutrido grupo de universitarios.

En su intervención, tampoco evadió las preguntas sobre la actualidad política, como la realidad de las próximas elecciones, cuyas opiniones compartió con los colegiales. De hecho, dedicó varios minutos a hablar del sistema democrático español, remarcando que no es presidencialista y, por lo tanto, quien elige al presidente es el Congreso.

Sobre todo, García-Escudero quiso defender el papel de la cámara alta del poder legislativo. Reconoció que no ejerce siempre bien sus funciones, pero afirmó que muy a menudo el Senado mejora las leyes que le llegan desde el Congreso. Por otro lado, desgranó que hay competencias particulares de esta cámara ya que, al ser de representación territorial, es la encargada de autorizar al gobierno a quitar competencias a una comunidad autónoma, como sucedió con la aplicación del artículo 155.

El presidente del Senado destacó también que, en contra de su imagen como cementerio de políticos, “la edad media es menor que en el Congreso”. Destacó que, como político, se puede lograr visibilidad trabajando desde el Senado, como lo hizo él durante el gobierno de Zapatero. “Mis debates con él abrían los telediarios”, recordó sobre las sesiones de control en esta cámara.

García-Escudero compartió muchas otras ideas con los colegiales aquinos y, antes de abandonar el Mayor, obsequió al Aquinas con la Medalla de honor del Senado, que entregó al director, Ignacio Antón.